Llegaron los días con bajas temperaturas y nada más rico que tomar algo calentito antes de cada comida. A continuación te acercamos algunas ideas fáciles, ricas y saludables.

Sopa de cebolla

Es un clásico de la gastronomía francesa. La base de esta preparación es un buen caldo de carne, idealmente hecho en casa a partir de cortes que tengan hueso y que ya estén asados, esto para que tenga más sabor. Además, se le puede agregar hierbas aromáticas y vegetales, como una rama de apio. Una vez que esté listo el caldo, se le agrega 3 cebollas picadas. Se deja cocinar hasta que la sopa llegue a hervor y, luego, se baja a fuego mínimo por unos 20 minutos. Antes de servir, incorporá unas minitostadas de pan con queso rallado gratinadas previamente en el horno.

Sopa de zapallo

Para esta preparación hay que hervir un zapallo, pero en lugar de hacerlo con agua, probá  con leche. Una vez que ya esté cocido, volcá todo el contenido de la olla en una licuadora y procesalo. Agregale un cucharadita de queso crema o crema de leche antes de servir en la mesa.

Sopa de tomate

En una olla colocá dos cucharadas de aceite y, cuando esté caliente, salteá ligeramente 2 dientes de ajo muy picaditos. Agregar una lata de tomate (si querés lo podés hacer también con tomates frescos que ya estén muy maduros) y una taza de agua. Cocinar hasta que llegue a hervor. Seguir cocinando por 15 minutos más a fuego mínimo. Apagar el fuego y agregar media taza de crema de leche. Servir con queso parmesano rallado por encima y albahaca fresca picada.