Es importante brindarle a los chicos variedad y nutrición también a la hora de tomar el té. A continuación de damos algunas ideas para que, cuando vuelven del cole, tengan ganas de sentarse en la mesa.
Una buena merienda debe incluir leche o derivados, fruta y cereales. Estos últimos les ofrecen a los chicos la energía necesaria para el buen funcionamiento de sus músculos y de su cerebro; los productos lácteos son alimentos ricos en calcio y en proteínas, fundamentales para su crecimiento. Por su parte, la fruta contiene fibra y la cantidad de vitamina C justa para reponer su sistema inmunológico. Es por ello que es importante mirar el plato de tu hijo y ver que todos los grupos estén cubiertos.
Para simplificarte un poco las cosas, te acercamos algunas opciones para que pongas en práctica:
- Panqueques rellenos con queso crema y trocitos de fruta,
- Yogurt con semillas de sésamo, granola, manzana, banana y miel,
- Huevos revueltos con una rodaja de queso y pan tostado,
- Tostadas con queso crema y cubitos de frutas,
- Tostada con salsa de tomate, queso derretido y orégano (¡una falsa pizzeta!).
Estas son solo algunas opciones. Es importante que a la hora de planear el té uses tu creatividad e incluyas colores, texturas y formas. Además, involucrá a tu hijo en el momento de planear, comprar y preparar las comidas. Es fundamental promover e incentivar que los más chicos adquieran hábitos alimenticios saludables.