Más allá del estilo de vida que se lleve, el organismo de la mujer suele tener muchos cambios durante sus etapas vitales.
A partir de la adolescencia, por ejemplo, hay varios procesos metabólicos y hormonales que nos acompañan a lo largo de la vida. Por eso, es muy importante tener en cuenta los distintos requerimientos nutricionales y adecuar la alimentación para mantenernos siempre saludables y poder hacer lo que nos gusta.
Aquí te acercamos algunos tips nutricionales para que puedas cuidarte en todo momento.
Antes de los 30:
- Ingerir alimentos ricos en calcio como huevo, lácteos y verduras de hojas verdes para asegurar huesos fuertes en el futuro.
- La importancia del desayuno: debe ser balanceado para tener energía durante el día. Elegir alimentos que aporten preferentemente proteínas, vitaminas y minerales.
- Incorporar hierro para evitar posibles anemias a causa de la menstruación.
A partir de los 30:
- Aumentar la ingesta de antioxidantes para combatir el envejecimiento celular y evitar arrugas en la piel. Elegir frutos rojos, vegetales de hojas verdes, kiwi y naranjas.
A partir de los 40:
- Priorizar el consumo de aceites saludables Omega 3 y 6 incorporando además pescado y frutos secos ya que los niveles de estrógeno empiezan a disminuir y con ello la protección hormonal que había antes de la cercanía de la menopausia.
- Disminuir el consumo de sodio evitando agregar sal a las comidas.
- Sumar alimentos con calcio para evitar la osteoporosis.
A partir de los 60:
- Si bien las necesidades nutricionales no varían, en caso de necesitarlo, cambiar las preparaciones hacia texturas más blandas o emulsionadas ya que puede haber disminución de la secreción de enzimas digestivas y salivares o presentar dificultad para masticar. Usar grasas saludables como la palta, aceite de oliva o preparar budines y terrinas caseras.
Ante cualquier consulta, no dejes de visitar a tu médico.
Dra. Florencia Rolandi, Médica Cardióloga, MN 100.667