Mejorar nuestra calidad de vida no sólo requiere alimentarse de manera adecuada y mantenerse activos. El buen dormir es fundamental para que el cuerpo restaure gran parte de sus funciones vitales. Ello nos permite llevar a cabo nuestras actividades diarias en armonía y evitar esfuerzos perjudiciales para la salud.
Un sueño reparador implica prestar atención a dos variables: la cantidad y la calidad. Hay personas que pueden dormir menos y otras que requieren una mayor cantidad de horas de descanso, pero los estudios sugieren que el periodo de sueño debe ser de al menos 7 horas corridas. Y si hay interrupciones, la calidad no será la ideal.

El insomnio se genera por problemas de mal dormir. Varios motivos pueden dañar nuestro descanso, la mayoría se relacionan con una mala alimentación, el estrés o los cambios de hábitos por el uso de luz artificial. Si dormimos mal, al día siguiente estaremos irritables, fatigados y nuestra atención se verá disminuida. Y de hacerse frecuente, el insomnio puede relacionarse con enfermedades como la obesidad, diabetes, infecciones a repetición y algunos tipos de cáncer.

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Te acercamos algunos tips teniendo en cuenta las recomendaciones de la Asociación Mundial de Medicina del Sueño para que pongas en práctica y mejores tu descanso.

  • Mantené horarios regulares para tus actividades y en especial para el sueño, incluso fines de semana y feriados.
  • Realizá ejercicio todos los días.
  • Evitá tomar bebidas como café, té, mate, bebidas cola o estimulantes a partir de la tarde.
  • Tomá un baño con agua templada antes de acostarte. Bajar la temperatura corporal ayuda al descanso.
  • Evitá las bebidas alcohólicas 3 horas antes de acostarte.
  • Evitá cenas abundantes y, como mínimo, esperá 2 horas antes de ir a la cama.
  • Evitá el ruido y la luz excesiva dado que actúan como estimulantes. En especial las pantallas de computadoras, teléfonos y LEDs, que crean el insomnio llamado «tecnológico».
  • Chequeá las condiciones ambientales antes de acostarte. La cama y almohada deben ser confortables. Y la temperatura del cuarto entre 16 y 22°C.
  • Generá espacios de relajación durante el día de al menos 10 minutos.
  • En caso de tomar medicación, consultá con tu médico si pueden causar insomnio.

Y si te despertás varias veces a la noche, sufrís de trastornos respiratorios, ronquidos o simplemente alguna duda, consultá con tu médico.

Dra. Florencia Rolandi, Médica Cardióloga, MN 100.667