Para esos días que no querés cocinar, pero sí comer algo bien rico, nutritivo y diferente, te acercamos tres opciones superfáciles para que hagas mientras el agua hierve.
Cuando llegás casada y con hambre, poner el agua a hervir para hacer unos fideos suele ser la opción más elegida. Para que esos días no sean siempre iguales, te contamos cómo hacer unas salsas, para una porción, en muy pocos minutos y que esos platos ya no sean los mismos.
- Crema de puerros:
Mientras se van haciendo los fideos, picá una cebolla y cortá un atado pequeño de puerros. En una sartén colocá un poco de aceite de oliva y, cuando está caliente, salteá los vegetales y salpimentalos. Una vez cocidos, agregales crema y calentá a fuego mínimo por unos minutos. Una vez hechos los fideos, agregalos a la sartén y lista tu pasta con salsa de puerros.
- Concassé de tomate, boconccinos, aceite de oliva, albahaca fresca y aceitunas negras:
En lugar de abrir una lata de salsa de tomates, te contamos cómo hacer una bien fresca. Para esto, pica una cebolla chica y salteala en una sartén con aceite de oliva. Cuando está trasparente, incorporá dos tomates grandes cubeteados en concassé y agregale ¼ de taza de caldo de verduras y un puñadito de boconcchinos. Calentá todo por unos minutos a fuego moderado. Agregale las pastas cocidas y emplatá. Antes de comer condimentá con aceite de oliva, albahaca fresca y aceitunas negras a gusto.
- Salsa de hongos secos
Remojá ½ taza de hongos secos con ½ copa de vino (tinto o blanco) por 10 minutos, luego colalos, pero ¡no tires el vino! Ponelo dentro de una cacerola junto con 1 taza de caldo de verduras y una cucharada de harina para espesar. Llevalo a fuego moderado por 10 minutos revolviendo constantemente para que no se formen grumos. Una vez cocido, agregale los hongos laminados y las pastas cocidas.
Que el tiempo y el cansancio no sean excusa para que todos los días comas rico y saludable. ¡Animate a probar estas salsas!
